INDONESIA: El retiro montfortiano en la región de Java
En la provincia indonesiana, cada año, tenemos nuestro retiro Montfortiano. A causa de las distancias, nuestro retiro anual se realiza siempre en tres regiones diferentes: Kalimantan, Java y Flores. El padre Carmelo, misionero monfortiano filipino, fue invitado este año a animar nuestro retiro. Para esto, estuvo casi un mes desplazándose de una región a otra.
En la región de Java, el retiro se realizó en la casa de retiros de “Betlehem” (“Khalwat Betlehem”) en la localidad de Jedong, Malang, Java del este del 12 al 15 de septiembre con la participación de 14 cohermanos de votos perpetuos (12 sacerdotes, y 2 diáconos).
El tema del retiro fue “Plenamente vivos en Cristo como Montfortianos”. A partir del tema los participantes fueron invitados a valorar cuatro aspectos muy importantes de nuestra vida a saber: Bautismo, Cruz, Comunidad y Apostolado. Al comienzo del retiro el padre Carmelo invitó a los cohermanos a tomar conciencia que el retiro es siempre una gracia de Dios: Un tiempo de gracia a en el camino personal, un momento de reconciliación y un momento de renovación permanente. Esta toma de conciencia ayudó a los participantes a profundizar en las reflexiones. A la luz de las enseñanzas de san Luis María de Montfort, los cuatro aspectos mencionados enriquecieron y cualificaron la vida espiritual de los participantes.
En la misa de clausura, los participantes fueron invitados a renovar su consagración a Dios a través de las manos de María, Nuestra Madre. A través del rito habitual de la consagración recitaron la fórmula de la consagración y se acercaron a la fuente bautismal haciendo el signo de la cruz para acercarse luego a la estatua de la Virgen María y besarla. Todos los participantes se dejaron impactar por la sencillez de este rito. Este acto de consagración les recordó y ayudó a actualizar las promesas hechas el día del propio Bautismo.
Gracias al padre Carmelo quien estuvo disponible para ayudar a los cohermanos de Indonesia a alimentar el fuego de su vocación como Monfortianos. Que el fruto de este retiro continúe y mantenga a los participantes “plenamente vivos en Cristo como montfortianos”.
--------------------