Retiro anual de la comunidad de la Casa General
ROMA, Italia - En el marco de los ejercicios espirituales, la comunidad de la Casa General organizó su retiro anual del domingo 25 al viernes 30 de septiembre de 2022 en la Casa General de los Hermanos de San Gabriel. Esta última fue predicada por el Reverendo Padre Sergio GASPARI, SMM y tenía como tema "el descenso hacia lo alto". Así define Gregorio de Nysse la humildad. Los pasajes bíblicos que han servido como apoyo a este tema son los siguientes: Mt 23,12: "El que se humilla será elevado" y Lc 1,52: "Ha derribado a los poderosos de sus tronos, ha enaltecido a los humildes"(Magnificat).
Para introducir el tema, el Predicador nos hizo saber que en la ley de la gravedad física la caída se hace hacia abajo; mientras que en la ley de la gravedad metafísica la caída se hace hacia arriba. Es propio del reino de los cielos. En efecto, Dios enaltece a los humildes, derriba a los posteriores de sus tronos.
Luego nos mostró, a través de los escritos de los Padres de la Iglesia y de los Santos, la importancia de la oración y de la práctica de las virtudes en nuestra vida como religiosos y sacerdotes. Ha evocado aquí los votos de San Juan Pablo II, que decía: «los sacerdotes son "maestros" de oración». Con la oración traen a Dios a los fieles que les han sido confiados, dan a su vida un nuevo apoyo y un nuevo sentido. Nuestra oración debe ayudarnos a vivir la caridad que, como dice el padre Pío de Pietrelcina, es la reina de las virtudes. Esta caridad es triple: material, espiritual y cultural.
Al final, el Predicador nos presentó a la Virgen María como modelo a imitar en nuestra vida cotidiana. Es la síntesis viva del evangelio según Benedicto XVI. La Virgen María nos enseña a vivir la Palabra de Dios. Aquí el padre Sergio ha mencionado los números 152-168 del Tratado de la Verdadera Devoción, donde el padre de Montfort nos dice que la devoción a la Virgen María es un camino fácil, corto, perfecto y seguro. María nos conduce sin trabas a Jesús.
Para concluir el retiro anual, se celebró una misa de acción de gracias. Después de esta, hubo un aperitivo con los Hermanos de San Gabriel y las Hermanas. Al final llegó la comida. Damos gracias al Señor por todas las gracias recibidas. A Jesús por María.
Diácono Charles MUMBERE KIPUTSU, SMM
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